-Adriana de Jesús Salamán
i.
12 de septiembre de 2017
El puerto de San Tomas cuenta con un pub con vista al mar, asientos en madera, mozzarella sticks y alitas como aperitivos, una mesera negra y joven, chicken nuggets y chicken tenders, una mesera blanca y mayor que la mesera negra y joven, y hamburguesas y emparedados. El menú está escrito en inglés. También cuentan con una clientela predominantemente blanca y turista, aún a una semana de un fenómeno atmosférico que destruyó el único hospital en la isla y varios hogares.
“Desde este restaurante casual y al aire libre, puedes disfrutar del hermoso Mar Caribe, embarcaciones navegantes, yates inmensos, y algunos de los cruceros más grandes del mundo”.[1] Algo así como una ventana al asombro.
El primer nombre del pub es cosquilla, pero en inglés. Una de sus definiciones asegura que se trata de acariciar alguna parte sensible del cuerpo para provocar una risa espasmódica. Una risa espasmódica, en cambio, puede ser la respuesta semi-histérica al desconocimiento de lo que sucede a tu alrededor. El acompañante suele ser un grito interno producto de la desesperación y la elaboración de una lista invisible de las posibles salidas a la conversación/al lugar/al día entero.
Justo al lado del pub hay una tienda de servicio de telefonía que, ante el fallo de las antenas, recibe decenas de clientes, en su mayoría mujeres negras y con hijos, quienes buscan la manera de comunicarse con sus familiares. La fila de espera se da en las afueras del local, donde el sol y el calor caribeño no dan tregua y el tiempo parece correr más lento de lo usual.
Adentro, un solo empleado modera la fila de servicio al cliente. Nadie curiosea por el resto del local.
En el pub, por otro lado, la comida podría tardar una hora. Mientras, puedes ordenar alcohol sentado/sentada/sentadx bajo la sombra, en perpetuo estado de fascinación.
ii.
14 de septiembre de 2017
Para sorpresa de |nadie|, desde el 3 de marzo de 2017 Colin Kaepernick —mariscal de campo que pasó gran parte de la temporada de fútbol americano sentado ante el sonido del himno de los Estados Unidos en protesta— continúa a la expectativa de ser contratado por un equipo de la liga profesional.
iii.
13 de septiembre de 2017
El precio del nuevo iPhone fluctúa entre $999 y $1,149. Es mercadeado como: “el dispositivo es la pantalla que llena la mano y deslumbra a los ojos”[2]. Aunque no sirva para hacer llamadas en medio de un desastre natural —tal como un huracán— al menos sirve de linterna para no tropezar.
Con eso en mente, el iPhone X estará en las tiendas el 3 de noviembre, y ya hay personas haciendo fila para adquirirlo.
iv.
Tensor – “que tensa, origina tensión o está dispuesto para producirla”.[3]
v.
El 6 de septiembre de 2017, miles de puertorriqueños instalaron tormenteras en sus hogares por temor al paso del huracán Irma por la isla al próximo día.
El 1 de mayo de 2017, edificios de la Milla de Oro amanecieron con tormenteras por temor al paso de miles de huracanes, cada uno con su propio cono de incertidumbre.
vi.
12 de septiembre de 2017
Una larga fila de santomeños se asoma, a solo pasos del puerto Crown Bay, frente a un negocio que repara neveras. En el San Tomas post-huracán Irma, el local vende diez libras de hielo a $3 por persona.
El tiempo de espera por una bolsa asciende a cuatro horas.
[1] www.ticklesdocksidepub.com
